La donación de sangre es siempre un tema muy relevante y genera muchas dudas: ¿quién puede donar? ¿Quién no puede? ¿Necesitaré esta sangre más adelante?
La sangre es, de hecho, una parte muy importante de nuestro cuerpo. Es bastante común escuchar la frase «lo llevas en la sangre». El sentido figurado que conlleva esta expresión muestra que la sangre tiene una fuerte representación en nuestras vidas, ya que es su circulación por nuestro cuerpo la que lleva el oxígeno y los nutrientes a todos los órganos, permitiendo el correcto funcionamiento de nuestro organismo.
Sin embargo, durante la mayor parte de la historia de la humanidad, la pérdida de sangre ha sido un problema sin resolver: no hay forma de recoger esta sustancia en la naturaleza ni de fabricarla. El único lugar donde se produce la sangre es dentro de los seres vivos.
¿Habría una manera de hacer una transfusión de sangre segura entre personas? La ciencia ha conseguido resolver este problema.
Conozca más sobre la donación de sangre y aprenda algunos mitos y verdades sobre el tema.
La historia de la donación de sangre
No fue hasta mediados del siglo XVII cuando el tema empezó a avanzar definitivamente, con la primera transfusión de sangre entre animales, realizada por el médico inglés Richard Lower. Luego de otro largo periodo y, tras varios problemas y polémicas, el también inglés James Blundell realizó la primera transfusión de sangre humana, en 1818.
Sin embargo, varios problemas -entre los principales, la coagulación de la sangre- seguían sucediendo y desafiaban a los científicos a encontrar una solución que permitiera reproducir finalmente la técnica a gran escala y de forma 100% segura.
Fue a principios del siglo XX cuando el austriaco Karl Landsteiner logró un descubrimiento que lo cambiaría todo: los grupos sanguíneos ABO.
¿Cuál es tu tipo de sangre?
Los laboratorios pueden darnos esta respuesta gracias a los estudios sobre el sistema ABO y el factor RH (descubierto en los años 40). Estos dos estudios tratan de la presencia o ausencia de algunos antígenos y anticuerpos en la superficie de los glóbulos rojos (RBC). Estas clasificaciones ayudaron a dividir qué tipos de sangre existían y a entender a quiénes podemos donar sangre o de quién podemos recibirla.
El sistema ABO divide la sangre en cuatro categorías: A, B, AB y O. El factor RH, por su parte, clasifica cada una de las categorías anteriores como positiva (+) o negativa (-).
Tu tipo de sangre es una herencia genética de tus padres. Existe un conjunto único de posibilidades para el grupo sanguíneo de una persona en función de la combinación de alelos dominantes o recesivos de tus padres directos.
Si no sabe cuál es su grupo sanguíneo, debe realizarse que la prueba para averiguarlo. En general, se realiza en los laboratorios de análisis clínicos y no requiere una orden del médico. La toma de muestra es rápida y el resultado suele salir el mismo día o al día siguiente.
Normalmente, las instituciones te permiten donar sangre incluso sin saber qué tipo tienes. Al fin y al cabo, el laboratorio siempre tendrá que analizar cuál es el tipo de sangre donada como uno de los procesos de seguridad.
¿Quién es donante universal y receptor universal?
El donante universal es el individuo que tiene el tipo de sangre O-. Las personas con este tipo de sangre pueden donar a personas con cualquier otro tipo de sangre. Curiosamente, las personas con este tipo de sangre sólo pueden recibir su propio tipo de sangre.
El receptor universal, en cambio, es AB+. Esto significa que una persona con este tipo de sangre puede recibir donaciones de cualquier tipo disponible en el banco de sangre. Sin embargo, AB+ sólo puede donar a AB+.
¿Quiénes pueden donar sangre?
En Uruguay, para donar sangre es necesario tener entre 18 y 65 años, contar con buen estado de salud, pesar más de 50 kg y tener cédula de identidad vigente.
Antes de donar es necesario dormir 6 horas y está permitido tomar líquidos como mate, café, té jugos (evitar alcohol, lácteos y sus derivados) y comer pan, galletitas, mermeladas, frutas, cereales.
Para más información, recomendamos ingresar al sitio web del Servicio Nacional de Sangre: sns.uy/condiciones-para-donar
Mitos y verdades sobre la donación de sangre
«La sangre donada me va a faltar».
Mito: Una persona adulta tiene, en promedio, 5 litros de sangre. En el proceso de donación se extraen unos 450 ml. Su cuerpo podrá reponer esta cantidad al día siguiente.
«No puedo donar sangre cuando estoy menstruando».
Mito: No hay ningún impedimento para que las mujeres que menstrúan donen sangre.
«Las mujeres pueden donar sangre 3 veces al año y los hombres hasta 4 veces»
Verdad: Las mujeres pueden hacer ese número de donaciones anuales con al menos 4 meses de espacio entre ellas. Los hombres deben esperar el espacio de 2 a 3meses.
«Una donación puede salvar hasta cuatro vidas»
Verdad: Como el material de donación puede separarse, puede utilizarse en diferentes situaciones clínicas.
«Donar sangre adelgaza o se licúa la sangre»
Mito: Donar sangre no tiene relación con perder o ganar peso. Otra mentira es que licúa o espesa la sangre. Continuarás como antes.
«Puedo donar sangre en cualquier momento del año»
Verdad: ¡Sí! Los centros de sangre están abiertos todo el año y necesitan iniciativas de donación cada mes para mantener las existencias en niveles satisfactorios.